Este laberinto de Chartres de 5 vueltas puede recorrerse tanto caminando como en sillas de ruedas. Intenta ser una opción de centramiento y calma para médicos, asistentes, pacientes y familias. Fue reconstruído en el año 2015 con venecitas, en el patio violeta del Hospital Garraham. Gracias al equipo de Medicina Integrativa, la Fundación Garraham, Ana Inés y Julio Avruj, colaboradores y el equipo de Red Los Mandalas junto a Javier Rubinstein guiando la construcción.